Optimiza el funcionamiento de tus equipos con grasa resistente a bajas temperaturas. Lubricación duradera y fiable incluso en entornos de frío extremo.
Grasa para bajas temperaturas
Protege tus equipos con grasa resistente al frío
Las condiciones de frío extremo ponen a prueba la resistencia de cada componente de la maquinaria. Cuando las temperaturas bajan, muchas grasas convencionales se endurecen, pierden adherencia y dejan de proteger eficazmente. Por eso, contar con una grasa para bajas temperaturas es esencial para garantizar la fiabilidad y el rendimiento de tus equipos.
En Interflon, expertos en lubricación industrial de alto rendimiento, nuestras grasas resistentes al frío están diseñadas para operar en entornos exigentes, protegiendo rodamientos, cadenas y guías frente al desgaste, la corrosión y los fallos por congelación.
Descubre cómo nuestras grasas para bajas temperaturas, formuladas con la innovadora tecnología MicPol®, maximizan la vida útil de tu maquinaria, reducen los costes de mantenimiento y aseguran la continuidad operativa incluso en los entornos más fríos.
¿Qué es la grasa para bajas temperaturas y para qué se utiliza?
La grasa resistente a bajas temperaturas está especialmente formulada para mantener su fluidez y propiedades protectoras en condiciones de frío extremo. A diferencia de las grasas estándar, que se solidifican y pierden eficacia, las grasas para bajas temperaturas de Interflon:
- Garantiza una película lubricante estable incluso en arranques en frío.
- Protege frente a óxido, corrosión y humedad ambiental.
- Evita fallos por congelación y desgaste prematuro de componentes.
Las grasas para bajas temperaturas se utilizan principalmente en rodamientos, cadenas, guías y conexiones mecánicas expuestas a ambientes de congelación, cámaras frigoríficas, equipos de exterior y maquinaria en sectores como la industria alimentaria, logística refrigerada, minería en altura, estaciones de esquí y procesamiento de alimentos congelados.
La importancia de utilizar grasa resistente al frío
Las bajas temperaturas son uno de los mayores enemigos de la lubricación. Cuando un lubricante pierde su viscosidad, la fricción aumenta, los equipos se desgastan y los costes de mantenimiento se disparan.
Las grasas resistente a bajas temperaturas de Interflon son la mejor defensa frente a estos riesgos porque:
- Reduce la fricción en arranques en frío.
- Garantiza estabilidad en ambientes con cambios bruscos de temperatura.
- Evita la formación de óxido y residuos en condiciones de humedad.
- Alarga los intervalos de lubricación, reduciendo paradas no planificadas.
Tecnología MicPol®: superior en frío extremo
Las grasas para bajas temperaturas de Interflon incorporan la exclusiva tecnología MicPol®, que crea una capa protectora de partículas sólidas lubricantes. Esta innovación asegura:
- Máxima resistencia en condiciones de frío extremo.
- Protección frente al agua, la nieve y la humedad ambiental.
- Intervalos de lubricación hasta 4 veces más largos.
- Reducción de fallos y menor coste de mantenimiento.
Grasa para bajas temperaturas adaptada a cada industria
En Interflon ofrecemos una amplia gama de grasas resistentes al frío, diseñadas para garantizar la protección y el rendimiento de la maquinaria en entornos de congelación y ambientes húmedos. Entre nuestras soluciones más destacadas:
- Interflon Food Grease MP2 (–45 °C): Grasa alimentaria multipropósito con certificación NSF H1. Excelente resistencia al agua, vapor y contaminantes, ideal para rodamientos y cadenas en cámaras frigoríficas y túneles de congelación.
- Interflon Food Grease LT2 (–45 °C): Grasa de grado alimentario formulada específicamente para procesos en frío y maquinaria expuesta al invierno. Mantiene la lubricación estable incluso en condiciones de congelación profunda.
- Interflon Bio Grease MP2 (–35 °C): Grasa biodegradable de alto rendimiento con gran adherencia y resistencia al agua y cargas de impacto. Indicada para maquinaria agrícola, forestal y equipos de exterior en bajas temperaturas.
- Interflon Fluor Grease 2 (–30 °C): Grasa fluorada con rango extremo de temperatura (–30 °C a +270 °C). Inerte químicamente, con muy baja migración de aceite, recomendada para aplicaciones críticas donde se combinan frío y agentes químicos.
- Interflon Buffer Guard (–30 °C): Grasa de alto desempeño para condiciones de choque y vibración, especialmente en aplicaciones ferroviarias como placas de tope y acoples. Resistente al agua y al frío extremo.
- Interflon Food Grease HD2 (–30 °C): Grasa alimentaria para aplicaciones con cargas elevadas y exposición a humedad. Ofrece estabilidad y protección en ambientes fríos, aunque diseñada principalmente para soportar temperaturas altas.
- Interflon Food Grease HD00 (–25 °C): Grasa semilíquida “heavy duty” con certificación NSF H1, excelente adhesión y resistencia a cargas elevadas. Ideal para sistemas centralizados de lubricación en entornos alimentarios.
- Interflon Grease LS1/2 (–20 °C): Grasa de alto rendimiento con gran resistencia al agua, vibraciones y cargas dinámicas. Solución versátil para diferentes aplicaciones industriales en condiciones frías.
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¿Necesitas una grasa para bajas temperaturas que resista el frío extremo? La grasa resistente al frío de Interflon es la solución ideal para aplicaciones industriales y alimentarias.
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