Descubre los beneficios del aceite de presión extrema para proteger maquinaria bajo altas cargas. Lubricación eficaz y duradera en condiciones severas.

Aceite de presión extrema para maquinaria industrial

En entornos industriales exigentes, donde las cargas pesadas, las altas temperaturas y los movimientos de fricción intensos son constantes, los sistemas de lubricación convencionales no siempre ofrecen la protección adecuada. Es aquí donde entran en juego los aceites de presión extrema (aceites EP), diseñados específicamente para ofrecer un rendimiento superior y prolongar la vida útil de los componentes.

 

Máquina agrícola roja en un entorno rural, donde se ven sus grandes ruedas y mecanismos que están sometidos a alta presión

¿Qué es el aceite de presión extrema?

Los aceites de presión extrema o aceites EP (por sus siglas en inglés, EP – Extreme Pressure) son una categoría específica de lubricantes industriales diseñados para proteger componentes metálicos sometidos a cargas mecánicas elevadas, fricción intensa y condiciones operativas severas donde los lubricantes convencionales no ofrecen un rendimiento adecuado.

A diferencia de los aceites estándar, los aceites EP están enriquecidos con aditivos activos que entran en acción cuando la presión y la temperatura alcanzan niveles críticos. En estas condiciones, los aditivos reaccionan químicamente con las superficies metálicas, creando una capa de protección sólida y resistente que se adhiere a los puntos de contacto más críticos del sistema mecánico.

Esta película protectora evita el contacto directo entre metales, reduce la fricción, disipa el calor generado y previene fenómenos como el gripado o el desgaste acelerado. Todo ello contribuye a alargar la vida útil de los componentes y a mantener la operatividad de los equipos bajo condiciones exigentes.

Su objetivo no es solo lubricar, sino actuar como una verdadera barrera protectora en entornos extremos donde otros lubricantes fallan.

 

Primer plano de engranajes metálicos con aceite industrial fluyendo entre los dientes, ilustrando la lubricación en condiciones de alta fricción.

Aditivos EP: la clave para el aceite de presión extrema

Los aditivos de presión extrema son la clave de estos aceites. Reaccionan químicamente cuando se alcanza un umbral crítico de temperatura y presión, es decir, cuando la película de aceite comienza a fallar. Su función es formar una capa protectora en la superficie del metal para evitar el contacto directo entre piezas móviles. 

Principales tipos de aditivos EP:

Tipos de Aditivos EP
Tipo de aditivo EP Composición química Modo de actuación Aplicaciones frecuentes
Azufre-fósforo Sulfuros y fosfatos Reaccionan con el metal
formando capas resistentes
Engranajes, reductores,
cojinetes
Clorados Compuestos de cloro Forman una película tipo
“sal metálica” bajo presión
Cortes y operaciones de
mecanizado intensivo
Polímeros sintéticos Materiales orgánicos Se deforman y absorben
cargas bajo fricción
Aplicaciones de
alta precisión
MicPol® Aditivos con micropartículas micronizadas y polarizadas Se fijan mecánicamente
a la superficie y reducen fricción
Equipos de precisión,
ambientes exigentes
Nota: Algunos aditivos como los clorados están siendo progresivamente sustituidos por razones medioambientales y de salud laboral.

 

Aerosoles de aceite industrial sin ninguna marca ni especificación

¿Cómo saber si un aceite es de presión extrema?

Identificar si un lubricante es de presión extrema (EP) no siempre es evidente a simple vista, pero hay varios indicadores clave que te permitirán saberlo con certeza:

1. Indicaciones en la ficha técnica (TDS) o ficha de seguridad (SDS)

Revisa siempre la documentación técnica del producto. Los aceites EP suelen incluir:

  • Referencias explícitas como: “Extreme Pressure”, “EP”, “Lubricante de alta carga”, etc.
  • Denominaciones como “EP 320”, indicando un aceite EP con viscosidad ISO 320.
  • Información sobre aditivos EP: azufre, fósforo, cloro, MicPol®, etc.

2. Aditivos EP

Los aceites EP contienen aditivos especiales que forman una película protectora entre superficies metálicas bajo cargas elevadas. Algunos de los más comunes:

  • Compuestos de azufre-fósforo (los más típicos).
  • Molibdeno (MoS₂) o grafito (más frecuentes en grasas que en aceites).
  • Zinc dialquilditiofosfato (ZDDP), con propiedades antidesgaste y EP.

Estos aditivos reaccionan con la superficie metálica cuando se rompe la película lubricante, evitando el contacto directo y reduciendo el desgaste.

3. Aplicaciones recomendadas por el fabricante

Los aceites EP se recomiendan para equipos sometidos a cargas o impactos elevados, como:

  • Engranajes y reductores
  • Rodamientos de gran tamaño
  • Cadenas de transmisión industrial
  • Prensas, molinos y transportadores pesados

⚠️ Si el fabricante menciona usos en condiciones extremas, probablemente se trate de un aceite EP.

4. Presencia de tecnología o aditivos específicos

Algunas marcas emplean tecnologías exclusivas que aportan propiedades de presión extrema. En el caso de Interflon:

MicPol® (Micronized Polarized) es una tecnología que microniza y polariza los lubricantes sólidos, permitiéndoles adherirse firmemente a superficies metálicas y formar una película seca, duradera y con bajo coeficiente de fricción.

  • Reduce drásticamente el desgaste
  • Prolonga los intervalos de lubricación
  • Disminuye el consumo y los costes
  • Ofrece alto rendimiento en entornos extremos
  • No gotea ni atrae suciedad

5. Aspecto físico y comportamiento

Aunque no es definitivo, los aceites EP suelen:

  • Ser más viscosos que los aceites estándar
  • Tener mayor adherencia a superficies metálicas
  • Resistir el lavado por agua y la formación de espuma
Técnico de mantenimiento industrial de Interflon aplicando lubricante especializado en maquinaria pesada y subiendo el pulgar hacia arriba afirmando que todo es correcto.

¿Para qué se utiliza el aceite de presión extrema?

Cuando las superficies metálicas comienzan a acercarse debido a una carga excesiva y la película lubricante convencional se ve comprometida, los aditivos EP se activan. Su función principal es:

  • Reaccionar con la superficie metálica para formar una capa compuesta de compuestos metálicos sulfurados o fosfatados.
  • Soportar presiones superiores a 1.000 kg/cm².
  • Actuar en las zonas calientes y de mayor fricción, sin afectar otras partes del sistema donde no se requiere esta protección específica.
Comparativa de Aceites
Característica Aceite convencional Aceite de presión extrema (EP)
Resistencia a cargas elevadas Limitada Excelente
Reacción ante presión extrema Ninguna Activa mediante aditivos químicos
Protección frente a gripado o soldadura No garantiza Sí, forma una barrera protectora
Condiciones de aplicación Condiciones normales Entornos industriales exigentes
Intervalo de relubricación Corto Más largo (con menos consumo de aceite)
Vida útil de componentes Menor Mayor, reduce el desgaste crítico

 

Engranaje de acero con alto nivel de oxidación, reflejando la falta de lubricación y exposición a condiciones adversas. Engranaje metálico restaurado y libre de óxido tras mantenimiento, listo para volver a funcionar en maquinaria industrial.

Beneficios del aceite de presión extrema

El uso de aceite de presión extrema aporta ventajas clave en la lubricación de maquinaria industrial sometida a altas cargas, fricción intensa y condiciones exigentes, donde los lubricantes convencionales no son suficientes.

1. Protección frente al desgaste severo

El beneficio principal del aceite EP es su capacidad para proteger superficies metálicas que tienen que soportar altas cargas, evitando el contacto directo entre ellas gracias a la formación de una capa protectora reactiva. Esta barrera permite una mayor durabilidad de los componentes y una reducción del riesgo de fallos mecánicos.

 El beneficio principal del aceite EP es su capacidad para proteger superficies metálicas que tienen que soportar altas cargas, evitando el contacto directo entre ellas gracias a la formación de una capa protectora reactiva. Esta barrera permite una mayor durabilidad de los componentes y una reducción del riesgo de fallos mecánicos.

 

2. Prevención del gripado y la soldadura por fricción

En condiciones de alta presión y temperatura, puede producirse el fenómeno de soldadura en frío, donde dos superficies metálicas se adhieren entre sí. Los aditivos EP impiden este efecto, ya que, gracias a su reacción química, se forman compuestos estables entre los metales, evitando el gripado y consiguiendo así una protección activa.

 

3. Reducción de la fricción y del consumo energético

Al minimizar el contacto entre superficies, el aceite EP disminuye la fricción, minimizando el esfuerzo mecánico y mejorando la eficiencia energética de la maquinaria, consiguiendo así equipos más productivos y un menor consumo eléctrico.

 

4. Mayor resistencia al agua, vapor y ambientes agresivos

Muchos aceites EP, especialmente los formulados con tecnologías avanzadas como MicPol®, presentan excelente resistencia al lavado por agua, humedad, vapor y contaminantes. Esto les dota de mayor estabilidad incluso en entornos húmedos o con presencia de agentes corrosivos.

 

5. Intervalos de lubricación más largos

Gracias a su capacidad para mantener la película protectora por más tiempo, los aceites EP permiten extender los intervalos de relubricación, lo que reduce la frecuencia de intervención y el consumo global de lubricante.

Consiguiendo así menos costes operativos, ahorrar en mano de obra y reducir residuos.

 

 6. Reducción del mantenimiento correctivo

Al proteger mejor las superficies metálicas y mantener la lubricación en condiciones extremas, disminuye la probabilidad de averías, paradas no planificadas y sustituciones prematuras de piezas. Consiguiendo así un mantenimiento más enfocado a la prevención.

 

 7. Mayor vida útil de la maquinaria

Todos los beneficios anteriores confluyen en un resultado global: una vida útil más larga para los equipos y un retorno de inversión más alto para el cliente. 

 

Productos de la marca Interflon diseñados para lubricación industrial bajo presión extrema.

Aceites EP con tecnología MicPol®

Como se ha comentado anteriormente, los aceites de presión extrema de Interflon van más allá de los lubricantes convencionales gracias a la tecnología de lubricación MicPol®, que permite:

  • Mayor adherencia a superficies metálicas, incluso en posiciones verticales.
  • Protección en condiciones donde un aceite convencional sería expulsado por agua o polvo.
  • Disminución del coeficiente de fricción a niveles excepcionales.
  • Intervalos de lubricación hasta 10 veces más largos en comparación con aceites convencionales.

Además, nuestros clientes han notado mejoras significativas tras el cambio a aceites EP con MicPol®, como la reducción de hasta un 60% en el consumo de lubricante, la prolongación de la vida útil de engranajes y rodamientos y la disminución de tiempos muertos y necesidades de mantenimiento correctivo.

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