4 tareas clave de mantenimiento en paradas durante el verano

Entre las actividades de mantenimiento industrial, hay tareas que no se pueden realizar con la maquinaria en funcionamiento, debido a la complejidad de la tarea, el prolongado tiempo de parada que esta requiere, u otros motivos que pueden perjudican a la producción de la planta.

Por este motivo, el mes de agosto es el momento más idóneo para realizar las paradas de planta, ya que suele ser un período de menor actividad, debido a la disminución de la demanda. Además, estas paradas garantizan que las máquinas estén a punto para septiembre.

Esta parada se aprovecha para poner a punto las instalaciones, mediante la implementación de tareas esenciales como la revisión de la maquinaria, la detección de posibles problemas o roturas, la realización de reparaciones o reemplazo de piezas, así como la correcta limpieza y lubricación de los equipos. Todo ello, sin provocar retrasos graves en la producción o inconvenientes molestos para la operativa de la empresa. Aprovechar este parón para una puesta a punto, supondrá, luego, optimizar la producción y ahorrar.

Veamos, pues, 4 tareas de mantenimiento esenciales para estas fechas:

1. Limpieza de maquinaria industrial

Algunas de las actividades de mantenimiento no se pueden realizar con la maquinaria en funcionamiento, entre ellas la limpieza en profundidad. Durante el año se realizan limpiezas superficiales rápidas, pero con estas no es suficiente, ya que la acumulación de polvo y suciedad va deteriorando la maquinaria. Es necesario limpiar en profundidad para conseguir que los equipos estén preparados para la siguiente temporada.

La limpieza que podemos hacer en verano tiene que garantizar un proceso de producción limpio y fluido que contribuya a prolongar la vida útil de las máquinas y evitar paradas innecesarias. Por tanto, esta tarea de mantenimiento preventiva y periódica es óptima para estas fechas.

2. Lubricación de maquinaria industrial La lubricación es esencial para mantener en perfecto estado la maquinaria, ya que su falta o exceso pueden provocar problemas graves como averías que pueden detener el proceso productivo, a la vez que pueden acortar la vida útil de la máquina. Cada equipo tiene sus propias especificaciones de lubricación, así como el tipo de grasa o aceite más adecuado para esta, pero todas las máquinas precisan de este mantenimiento y en el periodo estival es cuando mejor puede llevarse a cabo.

Aprovechando que la limpieza es la primera tarea a realizar durante las paradas de agosto, lo idóneo es continuar con la lubricación, ya que esta será más efectiva si se realiza con los componentes limpios. La lubricación ayudará a reducir fricciones, minimizar el desgaste de piezas, proteger los componentes contra la corrosión, etc. Además, al tener las máquinas paradas, la lubricación se podrá realizar más fácilmente y con menos riesgos, sobre todo en maquinaria de alta complejidad. En definitiva, ahorrar tiempo y optimizar costes a lo largo del año gracias al buen estado de las máquinas supone realizar un buen mantenimiento preventivo estival.

3. Reparaciones menores de maquinaria

A veces, algunos de los desperfectos o fallos no son lo suficientemente importantes para estropear nuestras máquinas, pero sí pueden acabar incidiendo en su productividad. Generalmente, las empresas no desean detener el proceso productivo para realizar una reparación menor, ya que nunca es buen momento para parar la producción, motivo por el que se termina aplazando o descartando esta tarea.

Las paradas vacacionales, son por lo tanto ideales para realizar estas reparaciones y ocuparse de los pequeños desperfectos. Pero para ello, es importante ser precavidos y tener las piezas de reemplazo antes de verano, contribuyendo a que estas reparaciones menores sean rápidas y menos costosas cuando se realicen.

4. Análisis y planificación del mantenimiento

El mantenimiento preventivo es la clave para evitar paradas innecesarias en pleno proceso productivo. Evitar estas paradas no planificadas supone tener un correcto conocimiento del estado de las máquinas y, consecuentemente actuar para asegurar su buen estado.

Los responsables de mantenimiento deben implementar un plan de mantenimiento y lubricación, pero diseñar una estrategia completa y proactiva de mantenimiento, precisa de tiempo. Por lo que el periodo vacacional es el mejor momento para ello. Pero si el equipo de mantenimiento no tiene disponibilidad o recursos para desarrollar esta planificación, siempre pueden optar por contratar un servicio externo como el plan de lubricación Double MP o el servicio de mantenimiento externo IMOS.

Para garantizar el éxito de estas tareas, no sólo es necesaria la implicación del equipo de mantenimiento, sino que es imprescindible utilizar los productos más adecuados, sean limpiadores de alto rendimiento que dejen los componentes limpios como el primer día, o lubricantes que garanticen la máxima reducción de la fricción para asegurar la productividad. Excesos o defectos pueden ocasionar graves problemas, por lo que obtener asesoramiento profesional de técnicos especialistas es también, la forma de que la labor de lubricar y limpiar sea resolutiva para una producen eficiente.